Slow cooker, la cocina de antaño, sin prisas pero sin pausas. Tenemos poco tiempo para cocinar, si, es cierto, y a menudo, resolvemos comidas y cenas con platos sencillos, rápidos y no siempre saludables. Lo de la cazuela a fuego lento de nuestras abuelas (el «chup chup») cada vez es más difícil. Por eso, he estado buscando soluciones y me he encontrado con algunos consejos. Uno de ellos, que aunque muchos de nosotros lo practicamos, no sabía que tenía nombre: “el batch cooking”. Esta expresión tan sugerente y tan actual, (batch, lote) se refiere a cocinar por lotes. Es decir, pasarte un día entero en la cocina y congelar platos para toda la semana. Pero implica tener que prescindir de los pocos días libres que tenemos y dedicarlos a comprar y cocinar . Es una solución pero a veces no sabes si lo que cocinas para dentro de dos días te apetecerá…Otra de las ideas que he encontrado son las ollas de cocción lenta. La marca más antigua y más conocida es Crockpot. La historia de este olla me ha encantado: Irving Naxon, inventor estadounidense judío quiso complacer a su madre. Ésta le había contado historias sobre el maravilloso y tierno estofado a base de alubias que solía hacer en la panadería de su pueblo en Lituania. El guiso, conocido como cholent, es un plato tradicional judío que se cocina durante todo el día. Es la comida universalmente única para el Shabat. Se supone que el estofado debe empezar a cocer antes del anochecer del viernes para evitar la prohibición de no cocinar en Shabat y debe estar completamente cocido antes del encendido de las velas, es decir, al atardecer.Pero en la aldea de la madre de Naxon los hornos no funcionaban a partir del viernes para respetar el día de descanso. Por ello, la olla se colocaba en el horno y se cocía con el calor residual durante todo un día. Según la madre de Naxon, el resultado era espectacular. Y así, en 1940, Naxon patentó la olla. Ahora ya hay varias marcas que utilizan la misma técnica.
Si bien las propiedades de la cocción lenta parecen ser muchas, volviendo al hilo del post, debo decir que esta solución me ha gustado: el consumo de la olla es muy bajo y permite dejar en preparación la comida sin atenderla. Puedes dejarla por la noche para el día siguiente o por el día para encontrar por la noche un plato caliente y delicioso. También se puede programar. La comida queda extraordinariamente tierna y conservando todas las propiedades.
Y para nuestros platos veganos he encontrado algunas páginas por la red interesantes. Aquí os las dejo. Yo por ahora he cocinado lentejas, garbanzos y patatas con verduras, pero me queda mucho por probar!
Slow cookers and crock pots have been around for decades. I remember my mom cooking with her crock pot back in the 1970s. I love my slow coocker!
Hi Megan!
It’s a fantastic option, different from how I was used to cooking. Thank you for your message!